El día 21 de enero se celebra el Día Europeo de la Mediación que coincide con el primer texto legislativo sobre mediación familiar en Europa a través de la Recomendación nº 98 aprobada por el Comité de Ministros del Consejo de Europa el 21 de enero de 1998.
Como siempre digo, la mediación es un sistema que tenemos todos y todas para llegar a solventar un problema o conflicto, con una empresa, una persona.
Pero ante todo es un DERECHO de cada ciudadano y ciudadana, que debe conocer y tener a su alcance, porque es un método económico y rápido, pero, sobre todo, su principal objetivo es conseguir que las personas que acuden a mediación, y hay que recordar, que lo hacen de manera libre, voluntaria y porque quieren acabar con un problema que les atormenta, y ya no saben como lidiar con él, porque les ahoga y les duele.
Porque esto es lo que pretende la mediación, acabar definitivamente con el problema, y para eso hay que ir a su origen y eliminar cualquier duda o aspereza que haya, da igual si llevamos un año o veinte divorciados, si cuando pensamos en la otra persona sigue habiendo ese odio, ese rencor, que no nos deja salir a adelante.
La mediación la podemos utilizar para hacer que nuestro divorcio sea menos doloroso, no hay que dejar nada en el tintero, y cuando hay que hacer este paso tan doloroso, lo mejor es hacerlo acompañado de un mediador o mediadora, que nos va a ayudar y nos va a dirigir para que encontremos una solución.
Pero una cosa ha de quedar muy clara, el mediador no nos va a dar la solución, porque la vamos a encontrar nosotros. Hay que confiar en el profesional, y desconfiar de aquel que va al grano, puesto que hay que rebuscar por los rincones.
Voy a poner un ejemplo, cuando hacemos limpieza general, quitamos todo y limpiamos los rincones ¿verdad? Porque además si no lo hacemos así, no estamos haciendo una super limpieza. Pues en mediación es exactamente lo mismo, vamos a hacer limpieza a fondo de nuestros sentimientos, de nuestro conflicto para que no nos dé más la lata.
Yo siempre digo, cuando estoy con las partes que en mediación les llamamos mediados, tenéis que confiar en la mediación, tenéis que confiar en mí, pero, ante todo, tenéis que confiar en vosotros, porque cuando acabe el proceso de mediación, todo estará solucionado, y habréis aprendido a convivir con vuestras decisiones.
Si has visitado a un abogado o abogada, ya sabes como va a ir el proceso, pero también debes conocer lo que la mediación te puede ofrecer, porque en los juzgados no te van a escuchar, pero en mediación sí.
Te atreves a confiar en ti, y en que puedes resolver tus problemas por ti mismo/a.
Puedes pedir más información en carme.olivencia@etmovettamen.com